“EL SUEÑO DE MI PADRE”
“EL SUEÑO DE MI PADRE”
Por JCM
La logia globalizadora de George Soros, con el apoyo de la ONU-FMI-BM, vuelve a hacer de las suyas en México. Ahora ha llegado el tiempo de promover la apostasía en nuestra patria.
En el lejano 1987 inició esta malvada ideología concebida en la retorcida mente del más grande especulador financiero para crear el caos en el mundo al patrocinar, a través de la “Open Society”, las ONG´S, que son las que harán el trabajo sucio de este “creador de revoluciones”.
El primer peldaño de esta escalera de la muerte fue promover la legalización del divorcio, seguido de la legalización de las drogas.
Luego, por allá en el año 2010 financió a las ONG´S para reconocer el “matrimonio igualitario” o “matrimonio” -mejor dicho, “unión”- homosexual, que ha sido reconocido en muchos de los códigos jurídicos de los países de occidente.
Luego, a inicios de 2018, “echó toda la carne al asador” para la legalización del aborto y con ello, todos los desórdenes sociales que ha ocasionado, sirviéndose del feminismo desaforado promovido por George en todos estos años.
Ahora nos toca “bailar con la fea”. Al triunfo de la izquierda radical, que apoya y promueve la “apostasía”, hacen alarde de estarlo logrando en España, Chile, Argentina, Colombia, etc., etc. En México, este criminal de la guerra económica endulza los odios de los liberales del nuevo sistema contra la Iglesia Católica para quitarle el “poder” espiritual que posee. Este laicismo radical es practicado por ateos y librepensadores, y son los mismos que han apoyado este programa caótico y desestabilizador.
El padre de este hijo de la mentira no es otro que Tivadar Soros, nacido en el imperio austrohúngaro en el seno de una familia judía en 1893 y conocido por el pseudónimo de “Teo Melas” y promotor de la lengua planificada internacional más difundida en el mundo en el último siglo: el “esperanto”, con la cual Tivadar soñaba que se hablara en todo el mundo, reemplazando a las lenguas nacionales. Además, soñaba con un mundo sin fronteras donde una sola moneda, una sola legislación y una sola religión -algo así como un “esperanto teológico” o religión universal sincrética-, como preludio de un nuevo orden mundial. George Soros, fiel a la herencia de su padre, ha logrado amasar un ilegal botín con las crisis financieras y su criminal guerra económica para financiar las ONG´S alrededor del mundo.
Por desgracia, ahora ya hay más “pañuelos” … los verdes (nacidos en Rosario, Argentina en 2003 en el Encuentro Nacional de Mujeres) que promueven el aborto legal, “seguro” y gratuito; los violetas de “#NiUnaMenos”, los naranjas, que piden la separación del Estado y la Iglesia, los fucsia de “No al maltrato animal”, los rojos, “por una nueva educación” y los negros a favor de la apostasía. En total, hasta la fecha, existen 24 variantes de “pañuelos” que se venden en los kioskos de la Argentina y ahora en México.
George Soros tiene una mano maléfica: lo que toca lo convierte en CAOS y los desórdenes en México son consecuencia de sus manejos. Recientemente tenemos la “crisis de migrantes” en México -la misma que asola a Europa con la complicidad de gobiernos como el de la Merkel- con la “Cuarta Transformación” y un ingrediente muy bien planificado que es el Foro de Sau Paulo, ejecutado por Fidel Castro y Lula de Silva.
Se viene un “tsunami” de la izquierda radical sobre el México que mantiene los valores cristianos. Al “sálvese el que pueda”, sólo nos queda levantar los ojos a María Santísima de Guadalupe para que aplaste la cabeza de la serpiente antigua que ha prohijado a George Soros.
